
Neuromodulación PONOS: Revolucionando el Manejo del Dolor
10 marzo, 2025
Clifis presente en el Congreso internacional de MBST
26 marzo, 2025Podología. Neurobiomecánica y Deporte

Al examinar la biomecánica del pie, podemos entender cómo diferentes estructuras anatómicas contribuyen a la movilidad y el rendimiento general.
Introducción a la Podología y el Deporte
En el estilo de vida activo de hoy, la podología desempeña un papel crucial en la mejora del rendimiento deportivo y la prevención de lesiones. Como podólogos, nos enfocamos en la salud y funcionalidad del pie, que sirve como la base para el movimiento de nuestro cuerpo.
Estudio de la marcha y los movimientos anatómicos
Los podólogos analizamos la marcha de un paciente—la forma en que camina o corre—para identificar cualquier irregularidad en el movimiento del pie, el compromiso muscular y las respuestas del sistema nervioso. Al examinar la biomecánica del pie, podemos entender cómo diferentes estructuras anatómicas contribuyen a la movilidad y el rendimiento general.
El estudio de la marcha y los movimientos anatómicos es fundamental para comprender cómo el cuerpo humano se desplaza y realiza diversas actividades. Abarca tanto la biomecánica de la locomoción, es decir, el análisis de las fuerzas que actúan sobre el cuerpo al caminar, correr o realizar otros movimientos, como el entendimiento de los movimientos anatómicos involucrados.
La marcha humana
La marcha humana es un patrón cíclico de movimientos que permite la locomoción bípeda. Para entenderla, se deben considerar los siguientes componentes:

1. Fases de la marcha:
- Fase de apoyo: Esta fase ocurre cuando uno de los pies está en contacto con el suelo y soporta el peso del cuerpo. Se puede dividir en varias subfases: la de contacto inicial, la de carga, la de apoyo medio, y la de propulsión.
- Fase de oscilación: Durante esta fase, el pie avanza en el aire sin contacto con el suelo, preparando el siguiente paso.
2. Ciclos de marcha: Un ciclo de marcha es el periodo de tiempo entre el contacto inicial de un pie y el contacto inicial del mismo pie nuevamente. Un ciclo completo de marcha consta de una fase de apoyo (con 60% del ciclo) y una fase de oscilación (con 40%).
3. Parámetros de la marcha: Se incluyen la longitud del paso, la velocidad de marcha, el tiempo de doble apoyo (cuando ambos pies están en contacto con el suelo), la amplitud del paso y el ángulo de la cadera.
4. Fuerzas en la marcha: Las fuerzas que actúan sobre el cuerpo durante la marcha incluyen la gravedad, la fuerza de reacción del suelo, las fuerzas musculares y las fuerzas inerciales. Estas fuerzas son responsables de mover el cuerpo hacia adelante y mantener el equilibrio.
Movimientos anatómicos
En cuanto a los movimientos anatómicos, estos se refieren a los diferentes tipos de movimientos que pueden realizar las articulaciones del cuerpo humano. Los principales movimientos anatómicos implicados en la marcha incluyen:
1. Flexión y extensión: En las articulaciones de las caderas, rodillas y tobillos, los movimientos de flexión (acercar una parte del cuerpo a su eje central) y extensión (alejarla) permiten la locomoción. Por ejemplo, durante la fase de oscilación, la pierna se flexiona en la rodilla para permitir que el pie se eleve del suelo, y luego se extiende para avanzar hacia adelante.
2. Abducción y aducción: Estos movimientos ocurren en las caderas, permitiendo que las piernas se muevan hacia afuera (abducción) o hacia adentro (aducción) respecto a la línea media del cuerpo. Estos movimientos son importantes para el equilibrio y el ajuste del cuerpo al caminar.
3. Rotación interna y externa: Se refiere a los movimientos de las extremidades (especialmente en las caderas y pies) alrededor de su eje longitudinal. La rotación de las caderas es esencial para un patrón de marcha eficiente y equilibrada.
4. Dorsiflexión y plantarflexión: Estos movimientos ocurren en los tobillos. La dorsiflexión es cuando el pie se mueve hacia arriba (como al levantar los dedos), y la plantarflexión es cuando el pie se mueve hacia abajo (como al empujar con los dedos al caminar).
Análisis de la marcha
El análisis de la marcha puede incluir estudios de la postura, los patrones de movimiento, y la biomecánica involucrada. En el contexto clínico, el análisis de la marcha se utiliza para evaluar y tratar a personas con problemas de movilidad o condiciones médicas que afectan el caminar, como lesiones, enfermedades neurológicas, o trastornos musculoesqueléticos.
Se pueden usar herramientas como:
- Plataformas de presión para medir las fuerzas que actúan sobre el pie.
- Cámaras de alta velocidad para observar los movimientos en detalle.
- Electromiografía para analizar la actividad muscular.
- Análisis cinemático para estudiar los ángulos y desplazamientos de las articulaciones.
El estudio de la marcha y los movimientos anatómicos es esencial tanto en la rehabilitación de pacientes como en el diseño de prótesis, calzado ortopédico, y la mejora del rendimiento en actividades deportivas. Comprender cómo el cuerpo se mueve y responde a las fuerzas permite optimizar el cuidado de la salud, prevenir lesiones y mejorar la calidad de vida.

Neurobiomecánica y alteraciones funcionales del Pie
La neurobiomecánica nos permite detectar cambios sutiles en la función del pie que pueden afectar otras partes del cuerpo, como las rodillas, caderas, columna vertebral, postura y movimiento general. Por ejemplo, la pronación excesiva del pie puede llevar a un desalineamiento de las rodillas, causando molestias y afectando el rendimiento deportivo.
La neurobiomecánica es un campo interdisciplinario que estudia cómo las señales neuronales afectan los movimientos biomecánicos del cuerpo, es decir, cómo el sistema nervioso central y periférico coordina y regula los movimientos y posturas del cuerpo, integrando información sensorial, motora y de control. En el contexto de los pies, la neurobiomecánica es crucial para entender cómo las alteraciones neurológicas o biomecánicas pueden afectar la función normal del pie y la marcha, lo que podría resultar en alteraciones funcionales del pie.
Neurobiomecánica del pie
El pie es una estructura anatómica compleja formada por huesos, articulaciones, músculos, tendones y ligamentos. Su función no solo depende de estos componentes biomecánicos, sino también de la interacción con el sistema nervioso para coordinar los movimientos y mantener el equilibrio y la postura. Los principales aspectos de la neurobiomecánica del pie incluyen:
1. Percepción sensorial: Los receptores sensoriales en el pie, como los mecanorreceptores (responsables de detectar la presión y el movimiento), son esenciales para la percepción de la posición del pie (propiocepción). Esto permite a la persona ajustar su postura y marcha de manera adecuada, previniendo caídas o movimientos ineficientes.
2. Control motor: El cerebro y la médula espinal envían señales a los músculos del pie para coordinar su actividad. El pie, al igual que otras partes del cuerpo, necesita señales motoras precisas para activar y desactivar los músculos de manera sincronizada durante las fases de la marcha, lo que implica la flexión y extensión de las articulaciones, la estabilización de la planta del pie, y la distribución de fuerzas.
3. Reflejos: El sistema nervioso también utiliza reflejos para responder rápidamente a estímulos, como el reflejo de la flexión plantar, que ayuda a proteger al pie de lesiones cuando se detecta un estímulo doloroso. La activación rápida de ciertos músculos también juega un papel importante en la estabilización y ajuste de la marcha.
4. Integración postural: La actividad del pie está relacionada con la función postural global del cuerpo. Los nervios y músculos del pie participan activamente en la transmisión de información al sistema nervioso central, que la utiliza para ajustar la postura y mantener el equilibrio, especialmente durante actividades de carga como caminar, correr o estar de pie.
Alteraciones funcionales del pie
Las alteraciones funcionales del pie se refieren a los cambios en su funcionamiento debido a disfunciones tanto en los componentes biomecánicos (huesos, músculos, ligamentos) como en los componentes neurológicos. Estas alteraciones pueden afectar la marcha y la estabilidad del cuerpo. Algunas de las alteraciones funcionales más comunes incluyen:
1. Pie plano (pie valgo o pronado)
- Causa: Puede ser debido a una debilidad muscular en los músculos intrínsecos del pie, una falta de soporte en los ligamentos o alteraciones en el control neuromuscular.
- Efecto: La caída del arco plantar genera un exceso de pronación (rotación interna del pie), lo que puede ocasionar dolor en el pie, tobillo y rodilla. Esta alteración también afecta la biomecánica de la marcha.
2. Pie cavo (arco alto)
- Causa: A menudo se asocia con alteraciones neuromusculares, como en algunas enfermedades neurológicas (por ejemplo, la parálisis cerebral o la esclerosis múltiple).
- Efecto: El pie cavo presenta un arco plantar excesivamente alto, lo que puede generar una distribución irregular de las cargas durante la marcha, llevando a dolor y a un mayor riesgo de lesiones en el pie y la pierna.
3. Dedos en garra o en martillo
- Causa: Se deben a una disfunción en los músculos y tendones que controlan los dedos, lo que a menudo está relacionado con una alteración en el control motor o el equilibrio de fuerzas musculares.
- Efecto: Los dedos se doblan hacia abajo, lo que puede causar dolor, callos y dificultades para caminar. La falta de control adecuado de la flexión y extensión de los dedos afecta la función del pie durante la marcha.
4. Tendinitis y fascitis plantar
- Causa: Pueden ser consecuencia de un uso excesivo o de alteraciones en la biomecánica del pie, como en el pie plano o el pie cavo. Además, la falta de control neuromuscular o un mal patrón de marcha pueden contribuir a una sobrecarga en la fascia plantar o los tendones.
- Efecto: La tendinitis y la fascitis plantar provocan dolor en el pie, particularmente en la zona del talón, y pueden alterar la marcha de manera significativa.
5. Neuropatía periférica
- Causa: Alteraciones en la función del sistema nervioso periférico (como en la diabetes, enfermedades neurológicas o lesiones nerviosas).
- Efecto: La neuropatía periférica afecta la sensación en los pies, lo que puede llevar a un control deficiente del pie y la marcha. Las personas con neuropatía pueden tener dificultades para percibir el terreno, lo que aumenta el riesgo de caídas y lesiones.
6. Alteraciones en la marcha y el equilibrio
- Causa: Las alteraciones en la función neurológica, como las debilidades musculares, los déficits sensoriales o los problemas en el control motor, pueden influir directamente en la capacidad de caminar correctamente.
- Efecto: Los problemas en el control de la marcha, la debilidad muscular o la falta de propiocepción pueden afectar la estabilidad y la coordinación durante el caminar, llevando a un patrón de marcha ineficiente o desequilibrada.

Evaluación Neurobiomecánica del Pie
- Electromiografía (EMG)
- Para evaluar la activación muscular y detectar déficits neuromusculares específicos.
- Análisis de la Marcha
- Uso de plataformas de fuerza y sistemas de captura de movimiento para evaluar alteraciones en la distribución de carga y el ciclo de marcha.
- Estudios de Propiocepción
- Evaluación de la capacidad del pie para detectar estímulos y ajustar movimientos en tiempo real.
- Imagenología Avanzada
- Resonancia magnética o ultrasonido para detectar daños estructurales que influyan en el control neuromuscular.
Avances Tecnológicos en el Tratamiento
- Plantillas Inteligentes
- Incorporan sensores que registran datos biomecánicos en tiempo real y proporcionan retroalimentación para corregir patrones anormales.
- Neuroestimulación Funcional
- Dispositivos que estimulan nervios o músculos específicos para restaurar la función del pie.
- Exoesqueletos y Ortesis Activas
- Ayudan a personas con déficits neurológicos a recuperar el control funcional durante la marcha.
- Entrenamiento con Realidad Virtual
- Proporciona entornos controlados para mejorar la propiocepción y el control motor en rehabilitación.
Enfoque Integrador para el Manejo Personalizado
Un enfoque neurobiomecánico eficaz debe combinar:
- Diagnóstico Integral: Identificación de déficits neurológicos, musculares y biomecánicos.
- Intervenciones Basadas en Evidencia: Uso de tecnologías avanzadas y programas de rehabilitación personalizados.
- Seguimiento Continuo: Monitoreo regular para ajustar el tratamiento en función de los progresos del paciente.
Soluciones personalizadas y avances en Neurobiomecánica
Al aprovechar los conocimientos de la neurobiomecánica, los podólogos pueden desarrollar planes de tratamiento personalizados, que incluyen ortesis a medida, ejercicios específicos y terapias avanzadas. Los avances recientes en este campo han proporcionado herramientas y técnicas más efectivas para mejorar la salud y el rendimiento atlético.
Los avances en neurobiomecánica han abierto nuevas posibilidades para desarrollar soluciones personalizadas que pueden mejorar el diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de trastornos del movimiento y alteraciones funcionales. En este contexto, la neurobiomecánica personalizada se enfoca en integrar tecnologías de vanguardia para tratar de manera específica las necesidades de cada individuo, tomando en cuenta tanto sus características anatómicas como las particularidades de su sistema nervioso.
A continuación, se detallan algunas de las soluciones personalizadas y los avances más significativos en neurobiomecánica:
Soluciones personalizadas en Neurobiomecánica
1. Plantillas y órtesis personalizadas:
- Las plantillas ortopédicas y las órtesis personalizadas son soluciones biomecánicas que se diseñan a medida para adaptarse a las características del pie de cada paciente. Estas ayudan a corregir problemas como el pie plano o el pie cavo, distribuyendo las cargas de manera más equilibrada y mejorando la marcha.
- Con el avance en la tecnología de escaneo 3D, ahora es posible crear plantillas y órtesis con un ajuste más preciso, lo que optimiza el alivio del dolor y la corrección postural.
- Además, en casos de patologías como la neuropatía periférica, las ortesis pueden ser diseñadas para brindar más soporte y mejorar el equilibrio del pie.

2. Dispositivos de estimulación neuromuscular:
- Los dispositivos de estimulación eléctrica neuromuscular (NMES) son una solución personalizada que se utiliza para ayudar a activar y fortalecer los músculos en pacientes con disfunción neurológica o muscular. Estos dispositivos aplican impulsos eléctricos de manera controlada para mejorar la fuerza muscular, la coordinación y la función en casos de lesiones medulares, accidente cerebrovascular o parálisis cerebral.
- En el ámbito de la rehabilitación de los pies, estos dispositivos pueden mejorar el control motor al activar de manera selectiva los músculos que son responsables de la marcha y el equilibrio.
3. Rehabilitación robótica personalizada:
- Los sistemas de rehabilitación robótica son dispositivos que permiten la movilización asistida de las extremidades de los pacientes, facilitando la rehabilitación en personas con movilidad reducida. Estos sistemas pueden ser ajustados para las necesidades individuales de cada paciente, mejorando la funcionalidad del pie y la marcha mediante la repetición de movimientos controlados.
- Ejemplos de ello incluyen los exoesqueletos y las plataformas de rehabilitación robótica que ayudan a las personas a recuperar su movilidad al caminar de forma más eficiente, simulando patrones de marcha fisiológicos.
4. Análisis biomecánico personalizado mediante tecnología avanzada:
- Las plataformas de presión plantar y los sistemas de análisis de la marcha que emplean cámaras de alta velocidad y sensores 3D permiten capturar los movimientos y las presiones a nivel de los pies durante la caminata. Estos dispositivos ayudan a crear un mapa completo de la marcha del paciente, lo que permite desarrollar soluciones personalizadas, como plantillas o programas de rehabilitación, para corregir desequilibrios y mejorar la funcionalidad.
- Análisis cinemático y electromiografía (EMG) también se utilizan para medir la actividad muscular en tiempo real, lo que puede ser útil en la rehabilitación neurológica para ajustar el tratamiento de manera precisa según las necesidades del paciente.
Avances en Neurobiomecánica
1. Neuroplasticidad y rehabilitación funcional:
- Uno de los avances más relevantes en neurobiomecánica es el uso de la neuroplasticidad para la rehabilitación de personas con daños en el sistema nervioso. La neuroplasticidad se refiere a la capacidad del cerebro y el sistema nervioso de reorganizarse y formar nuevas conexiones neuronales, especialmente después de una lesión o accidente cerebrovascular.
- En la neurobiomecánica, se emplean técnicas de entrenamiento motor y estimulaciones sensoriales para promover la recuperación de los movimientos del pie y la marcha. Esto se logra a través de ejercicios repetitivos y la estimulación de áreas cerebrales específicas, permitiendo que las funciones motoras se restablezcan en individuos con disfunciones neurológicas.
2. Exoesqueletos inteligentes:
- Los exoesqueletos son dispositivos robóticos que se ajustan al cuerpo humano para asistir y mejorar el movimiento, y los avances actuales están enfocados en hacerlos más inteligentes. Estos dispositivos no solo proporcionan apoyo físico, sino que también pueden adaptarse a los movimientos y necesidades específicas del usuario, gracias a los sensores de movimiento y los sistemas de control basados en inteligencia artificial (IA).
- En cuanto al pie y la marcha, los exoesqueletos pueden ser utilizados en pacientes con parálisis o debilidad muscular para restablecer la capacidad de caminar de manera eficiente y controlada, permitiendo un mayor grado de independencia y mejorando la calidad de vida.
3. Estimulación cerebral no invasiva:
- La estimulación cerebral no invasiva (técnicas como la estimulación magnética transcraneal, TMS) está ganando popularidad en la rehabilitación neuromuscular. Estos métodos aplican pulsos magnéticos al cerebro para estimular áreas específicas que controlan el movimiento, lo que puede ser útil en el tratamiento de trastornos de la marcha relacionados con lesiones cerebrales, enfermedades neurodegenerativas o accidentes cerebrovasculares.
- La estimulación cerebral no invasiva está siendo estudiada para mejorar la recuperación del control motor y la coordinación en personas con alteraciones en la marcha debido a condiciones neurológicas.
4. Realidad virtual (VR) y realidad aumentada (AR):
- La realidad virtual y la realidad aumentada se están utilizando cada vez más en la rehabilitación física y neurológica. Estas tecnologías permiten crear entornos de simulación que facilitan el entrenamiento motor y el ajuste de la marcha en un entorno controlado.
- En la neurobiomecánica, estas herramientas se utilizan para diseñar ejercicios interactivos que promuevan la corrección de patrones de marcha anormales, estimulando al paciente a mover sus pies de manera funcional y eficiente. Además, la realidad aumentada se puede integrar con dispositivos de estimulación para proporcionar retroalimentación inmediata sobre el desempeño del paciente.

5. Biomecánica adaptativa y dispositivos portátiles:
- Los avances en dispositivos portátiles (como los wearables) están permitiendo la monitorización continua de los movimientos del pie y las extremidades. Estos dispositivos, equipados con sensores de movimiento y de fuerza, permiten a los terapeutas y médicos ajustar las intervenciones en tiempo real.
- Los dispositivos biomecánicos adaptativos, como los zapatos inteligentes que ajustan su rigidez y soporte según el terreno o el patrón de marcha del paciente, están emergiendo como una solución innovadora en el tratamiento de trastornos funcionales del pie. Estos dispositivos ofrecen una personalización que responde a los cambios en la marcha del individuo.
La neurobiomecánica personalizada está revolucionando el tratamiento y la rehabilitación de trastornos del movimiento, en especial aquellos relacionados con el pie y la marcha. Los avances en tecnologías como la realidad virtual, los dispositivos de estimulación neuromuscular, los exoesqueletos inteligentes y las órtesis personalizadas están transformando la forma en que abordamos las alteraciones funcionales, mejorando no solo la funcionalidad del pie, sino también la calidad de vida de las personas que padecen estos trastornos. A medida que la investigación y la tecnología avanzan, las soluciones personalizadas continuarán mejorando, permitiendo un enfoque cada vez más preciso y efectivo para tratar las alteraciones neurológicas y biomecánicas.
Si necesitas información más específica sobre alguna de estas áreas o una propuesta personalizada, no dudes en preguntar a nuestros podólogos, Victor Triguero y Susana Velasco, que encantados estudiaran tu patología y te propondrán el tratamiento más adecuado. Llámanos al 926 27 20 81 y pide cita previa y no dejes de visitar nuestra web www.clifis.com

Todos los contenidos publicados en la web, blog y redes sociales de Clínica Clifis son de carácter informativo y/o divulgativo y no deben considerarse un sustituto del diagnóstico y asesoramiento clínico recibido. Esta información no debe utilizarse para el diagnóstico ni el tratamiento de ninguna patología. Los enlaces a otros webs sólo tienen carácter informativo.